martes, 2 de junio de 2009

JEAN PIAGET Y SUS APORTES A LA EDUCACION

Las investigaciones del psicólogo y epistemólogo suizo Jean Piaget (1896-1980) constituyen una importante aportación para explicar cómo se produce el conocimiento en general y el científico en particular. Marcan el inicio de una concepción constructivista del aprendizaje que se entiende como un proceso de construcción interno, activo e individual. El desarrollo cognitivo supone la adquisición sucesiva de estructuras mentales cada vez más complejas; dichas estructuras se van adquiriendo evolutivamente en sucesivas fases o estadios, caracterizados cada uno por un determinado nivel de su desarrollo.

Según la explicación genética de la inteligencia los estadios son los siguientes:

· Estadio sensoriomotor (0-2 años). La inteligencia del niño es fundamentalmente práctica, ligada a las acciones sensoriomotrices. A través de estas acciones y de sus coordinaciones, el sujeto empieza la estructura de la conservación y la intencionalidad, punto de partida y base para la construcción de las categorías operatorias posteriores, así como de la función simbólica.

· Estado preoperatorio (2-7 años). Los procesos de simbolización están en pleno desarrollo: el juego simbólico, esquemas verbales, imitación diferida, la reflexión motriz constituyen acciones interiorizadas que, a falta de conceptos y de pensamiento lógico, presentan una serie de limitaciones, como el egocentrismo, la falta de reversibilidad y un pensamiento aún basado en las apariencias perceptivas. La función simbólica puede definirse como la capacidad que tiene el sujeto para representarse un objeto u hecho no presentes por medio de objetos o gestos que le sirven para evocarlos. Son simbólicos en su representación; la culminación de esta función simbólica se presenta con la aparición del lenguaje, en el que las cosas son sustituidas por conjuntos de signos arbitrarios, como las palabras, que aún cuando arbitrarios, tienen carácter social y valor comunicativo.

· Estadio de las operaciones concretas (7-11 años). Se caracteriza por la aparición de la lógica y la reversibilidad y por la superación del egocentrismo. El pensamiento lógico y las operaciones intelectuales sólo son posibles en la medida en que el sujeto se enfrenta con problemas u objetos concretos. De igual manera, si estos objetos son suprimidos del campo de acción, las posibilidades disminuyen.

· Periodo de las operaciones formales o proporcionales (adolescencia y años posteriores). Aparece la lógica formal. El sujeto ya es capaz de reflexionar no tan sólo sobre los objetos concretos, sino además, sobre proporciones que contienen dichos objetos. El pensamiento es capaz de realizar la combinación lógica que le posibilita un análisis de las distintas resoluciones de un problema, se vuelve hipotético-deductivo.

La teoría genética presenta un doble atractivo para ser estudiada en el campo educativo. Es, por un lado, una teoría del conocimiento que dispone de una sólida fundamentación, basada en la investigación empírica sobre la construcción del conocimiento científico, y también es una teoría del desarrollo que trata de la evolución de las competencias intelectuales desde el nacimiento hasta la adolescencia, junto con el desarrollo de nociones y conceptos relacionados con áreas escolares y en especial con las matemáticas y las ciencias naturales.

Aprehender la magnitud de la teoría piagetiana supone un desafío. A pesar del prestigio que rodea su nombre y de la numerosísima bibliografía, proyectos y ensayos que dan cuenta de la aplicación de su teoría a la educación, la epistemología genética no logra traspasar como se merece los pétreos muros de la escuela, y el impacto de su teoría sobre la práctica educativa dista mucho, aún en la actualidad, de ofrecer frutos significativos en el ámbito escolar.
La educación ha recibido una valiosa aportación en lo que se refiere al sujeto epistemológico, al conocimiento de los procesos de desarrollo de la inteligencia y la concepción de un aprendizaje en su dimensión biológica, interaccionista y constructivista, ejes fundamentales de su teoría. Entendemos que si la escuela, los maestros y nuestro sistema asumen estas categorías, cambiaríamos radicalmente en cuanto a funciones, propósitos, contenidos y métodos, cambio que desencadenarían el nacimiento de una nueva escuela, escuela para el desarrollo apoyada en el desarrollo intelectual y social de los sujetos y en la ciencia como racionalidad por alcanzar.

LA FUENTE PSICOPEDAGOGICA

La fuente psicopedagógica suministra información sobre cómo aprenden los estudiantes, y, concretamente, cómo construyen los conocimientos. Estos datos se han ido conformando a partir de la psicología cognitiva y social, en los últimos años, de las investigaciones que se han realizado desde el campo de la didáctica de las ciencias. Sin embargo, es difícil separar las aportaciones de cada fuente curricular, ya que los estudios desde la epistemología de la ciencia han colaborado también a entender cómo se aprende ciencia a partir de las reflexiones sobre la construcción del saber científico y social. Además, se ha visto la gran incidencia que tiene en la motivación para el aprendizaje científico el hecho de relacionar la ciencia con las necesidades y problemas sociales.

El constructivismo es una posición compartida por diferentes tendencias de la investigación psicológica y educativa. Entre ellas se encuentran las teorías de Jean Piaget (1952), Lev S. Vygotsky (1978), David Ausubel (1963), Jerome Bruner (1960), y aun cuando ninguno de ellos se denominó como constructivista sus ideas y propuestas claramente ilustran las ideas de este paradigma.

PRESENTACION

La es consciente de que vivimos en cambio permanente, de que las ciencias en especial, están en constante evolución y de que, del mismo modo, las teorías sobre la educación, el currículo y el aprendizaje experimentan periódicamente modificaciones. Por eso este PEI contiene una síntesis de los principales aportes curriculares y pedagógicos con base en las tendencias predominantes en el momento así como las orientaciones necesarias para construir procesos de formación integral desde el nivel de Preescolar hasta el Programa de Formación Complementaria.

El propósito de este capítulo es el de apoyar a maestros, estudiantes, directivos y padres de familia para que tengan suficientes elementos de reflexión y orientación en el rol que cada uno debe desempeñar en los procesos educativos. La Institución se propone no sólo difundir estas ideas, sino promover talleres interactivos sobre estos temas, para animar también el intercambio de ideas y experiencias y hasta el posible trabajo conjunto entre los diferentes actores de la comunidad educativa haciendo posible la visión propuesta para los primeros años del nuevo siglo.
Los procesos de aprendizaje en todas las ciencias juega un importante papel en el desarrollo del pensamiento lógico, en la adquisición de competencias y contenidos relevantes para la vida, en la práctica de actitudes flexibles y críticas y, en definitiva, colabora a que los estudiantes estén mejor preparados para afrontar los desafíos de una sociedad en continuo cambio, que les exige tomar decisiones fundamentadas. Actualmente la tendencia existente en los currículos es la de incluir según la lógica y ontología de las disciplinas determinados niveles de competencias propuestas en los estándares curriculares establecidos a nivel nacional para todos los niveles, ciclos y programas, contextualizados a las necesidades, intereses y recursos institucionales y regionales.

Se trata de un documento abierto, que pretende contribuir a la reflexión mediante la presentación de criterios nacionales e institucionales que orienten las decisiones curriculares y pedagógicas, los cuales podrán ser tenidos en cuenta por los diferentes niveles, ciclos y programas según sus necesidades y en función de sus características y contextos de aplicación específica. No es un recetario extrapolable a cualquier situación, sino que quiere mostrar una forma fundamentada de abordar las distintas decisiones que supone el diseño de un currículo institucional.

La fuente psicopedagógica suministra informaciones sobre la manera en que los estudiantes construyen los conocimientos. Los datos se han ido conformando a partir de la psicología cognitiva y social, la didáctica de las ciencias y las fuentes epistemológica y social que de manera integral colaboran a la comprensión de la génesis del aprendizaje y la construcción social del conocimiento.

Se describen someramente las principales teorías sobre el aprendizaje: Jean Piaget, de Lev Semionovich Vigotsky, de David Ausubel, y se hace especial hincapié en la evolución del modelo constructivista social. Se tienen en cuenta las relaciones entre los factores cognitivos y afectivos y se realiza una breve reflexión sobre la incidencia en el aprendizaje de los procesos cognitivos y metacognitivos en condiciones normales y de educación especial. Se resumen las principales aportaciones desde esta fuente y de otras, en especial las ligadas al pensamiento complejo, para la toma de decisiones curriculares, pedagógicas, didácticas y evaluativas, tomando como base, desde luego, los referentes legales y lineamientos curriculares a nivel nacional.